miércoles, 21 de enero de 2015

SI O NO

SI O NO
Por: Ouspensky

En la vida ordinaria pensamos por medio de tesis y antítesis; siempre y en todas partes se presenta el “si” o el “no”, el “no” o el “si”.

Al pensar de un modo diferente, al pensar en una nueva forma, al pensar por medio de símbolos, llegué a comprender los errores fundamentales de nuestros procesos mentales.

En realidad, en todas partes y en todos los casos no había sino tres elementos.

No existían sólo el “sí” y el “no”, sino el “si”, el “no” y todavía algo más.

Y fue precisamente la naturaleza de este “tercer” elemento, inaccesible a la comprensión, lo que hizo inadecuados a todos los razonamientos y exigió un cambio en el método básico.

Vi que la solución a todos los problemas siempre venia de un tercer elemento desconocido, es decir, no venia de un tercer origen desconocido; y que sin este tercer elemento era imposible llegar a una solución correcta.

Además cuando hacia una pregunta, muy frecuentemente EMPEZABA A VER que la pregunta misma estaba erróneamente planteada.

En lugar de dar una respuesta inmediata a mi pregunta, LA “CONCIENCIA” a la que yo hablaba, empezaba a hacer girar mi pregunta y a voltearla, mostrán­dome que era incorrecta.

Poco a poco empecé a ver qué era lo que era incorrecto.

Tan pronto como comprendía claramente lo que era incorrecto en mi pregunta, veía yo la respuesta.

Pero la respuesta siempre incluía un tercer elemento que no había podido ver antes, porque mi pregunta estaba formulada siempre sobre dos elementos, la tesis y la antítesis.

Yo me formulé esto en la siguiente forma: que toda la dificultad estriba en el planteamiento de la pregunta.

Si pudiéramos plantear las preguntas correctamente sabríamos las respuestas.

Una pregunta correctamente planteada contiene la respuesta dentro de sí.

Ouspensky








No hay comentarios:

Publicar un comentario